jueves, 22 de enero de 2015

Camino a la escuela

Camino a la escuela, es un documental que se estrenará mañana, 23 de enero, en cines. Su director es  el francés Pascal Plisson.
Este documental cuenta la historia real de cuatro niños, cuatro héroes para mi gusto. 
Ellos se llaman Carlitos, Zahira, Jackson y Samuel. Estos cuatro niños, deben enfrentarse cada día con un enorme número de dificultades, adversidades y peligros para poder llegar a la escuela. 
Sí, parece mentira, nosotros todos los días vemos a niños (y no tan niños) enfadados porque tienen que venir a clase y quejándose por todo, y otros niños, en otras partes del mundo, están dispuestos a pasar un montón de adversidades para poder ir a aprender a una escuela, que seguro, seguro, no tiene ni pizarra digital, ni ordenador con conexión a internet, ni todas las comodidades de las que disponemos aquí. 
Estas son sus historias: 
Jackson, 11 años, Kenia. Este niño de sonrisa amplia y mirada limpia, recorre junto a su hermana menor, 15 km caminando, a través de la sabana, llena de animales salvajes, pero no les importa arriesgase, durante 2 horas y 15 km, con tal de llegar a la escuela y aprender. Tiene un sueño: ser piloto y volar por todo el mundo. 

Zahira, Marruecos. Exactamente, esta niña de 12 años, vive en la cordillera del Atlas de Marruecos, sistema montañoso del norte de África. Ella está en un internado y es impresionante verla despedirse de su padre, cuando se va al internado, a pie, 22 km a través de las montañas, junto con dos amigas. 

Carlitos, Argentina. Carlitos tiene 11 años, y recorre dos veces cada día, a caballo, los más de 18 kilómetros que separa su vivienda de la escuela en la que estudia. Llevando a su hermana pequeña detrás, viaja a través de montañas y grandes llanuras de una de las regiones más inhóspitas de la Patagonia argentina. Tienen que aguantar las inclemencias del tiempo, pero están encantados de ir a aprender. Carlitos de mayor quiere ser veterinario. 

Y la que para mí es la más impresionante de las 4 historias, por su afán de superación y por el amor que demuestran sus hermanos: Samuel, de India. Tiene 13 años y no puede andar porque tiene una discapacidad. Su escuela está a 4 km de su casa, y ese trayecto debe hacerlo en su silla de ruedas (una silla mucho más rudimentaria de la que todos nos imaginamos cuando pensamos en una silla de ruedas), a través de caminos de arena, ríos y otros obstáculos. Son sus dos hermanos, más pequeños que él, los que le ayudan a hacer ese trayecto cada día. ¡Impresionante, ver la imagen de estos dos niños empujando, y levantando la silla entre la maleza! 

Esto parece el mundo al revés. Algo debemos estar haciendo mal, en este primer mundo.

Os dejo el tráiler del documental para que lo veáis. Impresionante, ¿verdad?


 

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